Una voz que vibra desde el silencio.

Por: Yoanka Dorta.

Kanki y su hija Bernardette, quien nos ayudó con la entrevista.

Hace unos días en la sede del Instituto Cubano de Investigación Cultural “Juan Marinello”, se hizo entrega de los premios Memoria Viva, en varias categorías. Remedios tuvo el orgullo de recibir uno de ellos en la categoría de Personalidades.

Días después en Granma se mencionaba la entrega de esta distinción a Blanca María Granda García y se referían a su labor como comparsera en Remedios. El premio se otorga a Blanca María Granda García, Kanki, por la propuesta “¿Campanilla, Blanca o la tía Kanki? Una voz que vibra desde el silencio, realizada por los investigadores Juan Carlos Hernández Rodríguez y Erick González Bello.

Vestida de blanco con su personaje Campanilla, en la Colmenita de San Juan.

Estos investigadores dejan clara en su trabajo la impronta dejada en la ciudad de Remedios por la promotora natural más exitosa nacida en esta tierra. Esto se valida con su trayectoria, talento y pericia para la formación de compañías de espectáculos infantiles. Su obra trasciende más allá al incorporarse ella misma con su personaje Campanilla en la reciente creación de la Colmenita de San Juan, así como las giras que realizó por todo el país, presentando  sus espectáculos. También trabajó y presentó sus creaciones en Festivales Mundiales de la Juventud y los estudiantes.

Lo más importante de su labor es cómo inculca y forma valores en los niños desde todas las manifestaciones del arte, logrando incluso la reincorporación de algunos con trastornos de conducta a la sociedad.

Colmenita de San Juan.

Cuando yo era niña ya ella era artista. Así la vi siempre, aunque algo en ella no era como los que veía en la televisión. Kanki siempre ha tenido un don especial, que la hace crear de forma natural. Más de  30 años de su vida, ha dedicado Blanca María Granda García a la promoción cultural. Varias generaciones de remedianos han  formado parte de sus grupos de aficionados, muchos laureados a diferentes niveles. Su  intenso quehacer es una muestra de lo que se puede lograr cuando se unen talento y corazón. Una penosa enfermedad ha robado el sonido a su voz, pero esto no ha amilanado sus fuerzas, ni ha cejado en su empeño de ver brotar el talento y las sonrisas infantiles.  

A pesar de la enfermedad sigue siendo una voz que vibra desde el silencio en Remedios y para toda la nación, convirtiéndose en Memoria Viva de Cuba.